No me digáis que no hay tiempo.
Lo que puede que no haya sean ganas...
LLeva el mismo tiempo hacerse uno mismo una pizza como Dios manda que esperar a que te traigan a casa una que a saber por qué manos habrá pasado y qué le habrán puesto...
Hoy degusto mi primera pizza para cenar.
Los que me leáis sabréis de sobra que no iba a ser tan tirada como para despacharme llamando al Telepizza o al Pizza Hut.
He preferido llamar a los Tele-papis.
La mise en place:
A veces lo sencillo es lo más sabroso.
Un truqui para que quede mejor la masa:
Disponemos los ingredientes:
Horneamos y ¡lista!
(Lo del chupe es para que darse una idea del tamaño, que tampoco me he comido una tamaño rueda).
A mesa puesta, así da gusto.
¡Al ataque!
Poco Mistol va a haber que usar para el plato de la cena...

0 comentarios a esta entrada:
Publicar un comentario
Mi blog se alimenta de tus comentarios